Tostamos el café de a poquitos: en menos de quince días los granos pasan de la tostión a tus manos. Su aroma intenso y dulce te permite sentir la brisa de la finca cafetera en tu taza. Cierra los ojos, huele y disfruta la frescura de lo más auténtico de Colombia.
Este café que te estas tomando es 100% colombiano y 100% arábico, cultivado en nuestras peñas cafeteras y recolectado por campesinos, dándole ese toque humano a la cadena productiva de este alimento.
